En los últimos meses se ha podido comprobar como ha aumentado de manera notable el uso fraudulento de las tarjetas de aparcamiento específicas para los vehículos de personas con minusvalía. A diario ocurre esa situación que resulta lamentable y que supone un menoscabo notable de la autonomía e independencia de aquellos que conducen coches para minusválidos.
En concreto, sobre el uso inapropiado de esas tarjetas hay casos de todo tipo:
- Como se otorgan de por vida, hay individuos que emplean las que tenían sus familiares fallecidos.
- Se producen falsificaciones.
- Se utilizan las de amigos o familiares cuando estos no cogen sus coches de minusválidos.
Por estas situaciones y otras muchas más, las federaciones de asociaciones de discapacitados físicos y orgánicos están solicitando un mayor control de la expedición de tarjetas así como mejoras en ellas, tales como la inclusión de una fotografía del dueño o un holograma que impida su falsificación.